Protección para colchón infantil, bebés Camas y complementos
68Un protector de colchón es una excelente idea para mantener el colchón fresco durante más tiempo. Pero si alguna vez ha buscado este artículo para proteger la cama de su hijo, se habrá dado cuenta de que existen varios tipos. Entonces, ¿cómo elegir el producto adecuado? Te lo contamos todo.
Lo básico para encontrar el protector de colchón perfecto
Probablemente no te sorprenda, pero para encontrar la funda de colchón ideal, primero tienes que medir el colchón de tu pequeño. Existen diferentes medidas para las camas infantiles: 40 x 80, 60 x120, 70 x140 o incluso 90 x 190 para los niños más grandes.
Y no olvides medir el grosor del colchón. Los colchones de los niños son más finos que los de los adultos (una media de 15 cm frente a 28 cm). Así que este es un detalle que cuenta. No olvides elegir un colchón con una copa ligeramente más gruesa que el grosor del propio colchón. Esto te permitirá cubrir bien el colchón.
A continuación, debes elegir la forma del protector de colchón. Existen tres tipos. El primero es una funda completa, que suele utilizarse más en camas de adultos. Se utiliza sobre todo para renovar un colchón viejo. Otra opción es la sábana bajera. Al igual que una sábana bajera, cubre la parte superior y los laterales del colchón. Es la mejor opción para proteger la cama de un niño, sea cual sea su edad.
La última opción es el cubrecolchón de bandeja. Se trata de una sábana que se coloca encima del colchón. Si el niño se mueve mucho, esta protección puede deshacerse. Se sujeta con sólo 4 gomas elásticas. Para mayor seguridad, es mejor optar por el protector de colchón.
Materiales, un punto importante
Te tomas tu tiempo para elegir los materiales de la ropa de cama de tu bebé. Lo mismo ocurre con el protector del colchón, aunque no esté en contacto directo con el bebé.
El algodón es el material básico de una sábana bajera. Es suave y absorbe bien el sudor (y, por tanto, la humedad). El protector de colchón de algodón puede ser de rizo o de forro polar. El primero le mantendrá fresco y, por tanto, es perfecto para el verano. El segundo mantiene el calor y, obviamente, se recomienda para el invierno. También hay protectores de colchón de algodón de rizo, que son suaves, cómodos, ventilados e impermeables.
La microfibra también puede utilizarse para confeccionar una sábana bajera. Suave y flexible, se seca muy rápidamente, por lo que es ideal para las cunas que pueden ensuciarse rápidamente. Muy absorbente, esta protección es perfecta para mantener seco a su hijo.
Por último, Coolplus es muy transpirable y evacua muy bien la humedad. Es el material perfecto para el verano.
También tendrás que tener en cuenta a tu bebé. ¿Sigue teniendo pequeños accidentes? Elige una funda de colchón impermeable. Con una fina capa de poliuretano o PVC (más ruidoso), actúa como una pantalla entre el durmiente y el colchón. Para una higiene de gama alta, los cubrecolchones absorbentes son ideales.
Para los niños sensibles o alérgicos, un modelo antiácaros será perfecto. Es una excelente barrera entre el niño y los ácaros del polvo, pero también contra el moho. Si quieres un tejido sano, elige modelos con certificación Oeko-tex.
En cuanto a la estética, la mayoría de los protectores de colchón son blancos, pero también puede encontrar modelos en otros colores. Es libre de elegir el que más le guste. No obstante, para que tu funda quede lo más discreta posible bajo la sábana, el blanco es una excelente elección.