Para un niño, una niña o un ambiente mixto, diseñar el dormitorio de un menor requiere algunas reglas básicas. Teniendo en cuenta su edad y sus gustos, ¡puedes estar seguro de que triunfarás en la decoración de la habitación de tu hijo! Desde la colocación de los muebles para que sean accesibles, pensando en la seguridad de tus hijos, descubre todos los consejos de diseño para un ¡éxito en la decoración del dormitorio infantil!
En el dormitorio de un niño, ¡piensa primero en la seguridad!
¡La seguridad de tu hijo es lo primero! Y sobre todo en su habitación, una estancia íntima en la que querrá aislarse para crecer tranquilo.
Amueblar la habitación de un niño empieza por asegurar las tomas de corriente, así como las ventanas. Además, recuerda asegurar las estanterías, cómodas, armarios y otros muebles a las paredes, para que no caigan accidentalmente sobre tu hijo. Lo mismo ocurre con los cordones de las persianas y los cables eléctricos, que deben mantenerse fuera de su alcance. Por último, considera la posibilidad de utilizar tapas de enchufes para evitar el riesgo de electrocución impidiendo el acceso a los enchufes de pared.
Dado que las luces son una parte integral de la decoración del dormitorio de los niños, opta mejor por luces LED recargables. De este modo, tus hijos podrán manejarlas con seguridad y total independencia.
Elige muebles adecuados a la edad de tus hijos
En el dormitorio de un niño, la elección de los muebles se basa en su edad. Opta por muebles que se adapten perfectamente al tamaño de tu hijo y sean fáciles de manejar, como un armario pequeño, una cama baja, una mesa pequeña y sillas también pequeñas. Apuesta de igual forma por materiales resistentes : los muebles deben ser robustos y resistentes para soportar el desgaste y los posibles golpes. Para ello, los modelos de muebles con esquinas redondeadas están de moda y ¡son seguros!
Además, si eliges muebles diseñados con materiales fáciles de limpiar, te asegurarás el mantenimiento de una higiene perfecta en la habitación de tu hijo. Lo ideal, pues, es instalar muebles de madera en bruto o polipropileno, que podrás lavar y limpiar simplemente con un paño suave y jabón negro.
Definir zonas funcionales para amueblar correctamente una habitación infantil
Lo más importante de la habitación de un niño es que se sienta cómodo en ella. Para que pueda organizarse de forma autónoma, aprovecha la distribución de la habitación para definir las zonas funcionales. Por ejemplo, crea una zona para dormir, otra para jugar y otra para trabajar. Esta organización te ayudará a optimizar el espacio y, al mismo tiempo, animará a tu hijo a utilizar su habitación de forma más eficiente.
- La zona de dormir está dedicada a la cama del niño. Está idealmente situada en un rincón tranquilo y alejado de distracciones.
- La zona de juegos está reservada para las actividades lúdicas de tu hijo. Puede estar equipada con una pequeña mesa, sillas, una alfombra de juegos y almacén para juguetes.
- La zona de estudio, por su parte, debe estar ordenada. Está destinada a las actividades de aprendizaje y estudio. Esta parte de la habitación del niño se equipará con un escritorio, una silla cómoda, una lámpara de escritorio y un espacio para guardar el material escolar.
- La zona de estudio, por su parte, debe estar ordenada.
Piensa también en crear una zona de almacenaje compuesta por un armario, una cómoda, cestas y estanterías. Pero también, una zona de relax, con un pequeño sofá, cojines, una librería y sus juegos de mesa favoritos.
¿Qué luminarias elegir para un correcto diseño en el dormitorio de un niño?
Para proporcionar a tu hijo una habitación cómoda, acogedora y cálida, solo hay un secreto: ¡la luminosidad!
De hecho, las luminarias son un elemento clave para diseñar un ambiente agradable en una habitación. Por ejemplo, puedes colocar una pequeña lámpara de mesilla junto a su cama para que pueda leer o jugar antes de dormir. También se puede utilizar como luz nocturna para tranquilizar a tu hijo durante la noche.
Las guirnaldas de luces aportan un toque de magia y poesía a la habitación de los niños. Pueden colgarse en la pared, alrededor de la ventana o de la cama, o rodeando un mueble, mientras que la lámpara de techo central sigue siendo un objeto decorativo esencial. Esta última permite iluminar toda la habitación y difundir una luz uniforme y confortable. A partir de los 3 años, puedes instalar una «bombilla inteligente» en la lámpara de techo. A tu hijo le resultará curioso y divertido descubrir esta tecnología que le permite controlar la intensidad de la luz en su habitación. Por último, opta por una sencilla lámpara de mesa para iluminar su escritorio o una estantería. Este modelo de lámpara proporcionará a tu hijo una fuente de luz adicional durante sus trabajos escolares.